Los trastornos de la comunicación social son un grupo de afecciones que afectan la capacidad de una persona para comunicarse e interactuar con los demás en contextos sociales. Estos trastornos se caracterizan por dificultades persistentes en el uso social del lenguaje verbal y no verbal.

Características principales:
- Dificultades en la reciprocidad social:
- Problemas para iniciar o mantener conversaciones.
- Dificultad para comprender las señales sociales y las emociones de los demás.
- Problemas para adaptar el lenguaje a diferentes contextos sociales.
- Dificultades en la comunicación no verbal:
- Problemas para usar y comprender el lenguaje corporal, las expresiones faciales y el contacto visual.
- Dificultad para interpretar el tono de voz y el lenguaje figurativo.
- Dificultades para desarrollar y mantener relaciones:
- Problemas para hacer amigos y mantener relaciones.
- Dificultad para comprender las normas sociales y las expectativas de las relaciones.
Trastorno del espectro autista (TEA):
El TEA es uno de los trastornos de la comunicación social más conocidos.
Se caracteriza por dificultades persistentes en la comunicación e interacción social, así como por patrones de comportamiento, intereses o actividades restringidos y repetitivos.
El TEA es un espectro, lo que significa que la gravedad de los síntomas varía de una persona a otra.
Otros trastornos de la comunicación social:
Aunque el TEA es el más conocido, existen otros trastornos que pueden afectar la comunicación social, como el trastorno de la comunicación social (pragmático). Este trastorno se caracteriza principalmente por las dificultades en el uso del lenguaje social, pero sin los comportamientos repetitivos y restringidos del TEA.
Impacto en la vida diaria:
Los trastornos de la comunicación social pueden tener un impacto significativo en la vida diaria de una persona, afectando sus relaciones, su desempeño académico y laboral, y su bienestar emocional.
Importancia de la intervención temprana:
La intervención temprana es crucial para ayudar a las personas con trastornos de la comunicación social a desarrollar habilidades de comunicación y sociales efectivas.
Es importante destacar que la evaluación y el diagnóstico de estos trastornos deben ser realizados por profesionales de la salud capacitados.
